La infección en encías puede aparecer con un simple sangrado al cepillarte los dientes. ¿Lo sabías?
Puede que ya hayas notado dolor, enrojecimiento o sangrado al cepillarte, y estos son signos claros de que algo no va bien. Aunque al principio parezca algo leve, si no tomas medidas, puede llevar a problemas más serios.
Hoy, desde la Clínica Dental en Gijón Zigomat, te explico por qué es fundamental cuidar la salud de tus encías y qué medidas puedes tomar para evitar complicaciones mayores.
¿Cómo identificar una infección en encías?
Detectar una infección en encías a tiempo es clave para evitar que evolucione en problemas más serios como la gingivitis o la periodontitis.
Muchas veces, los primeros signos pasan desapercibidos, pero hay varios síntomas que te pueden dar una idea de que es el momento de revisar tu salud dental.
Aquí te explico cómo reconocer una infección en encías y cuándo deberías buscar tratamiento:
Síntomas de que tienes una infección en las encías
Los primeros indicios de una infección en encías suelen ser molestias leves que, si no se tratan, pueden empeorar. Estos son algunos de los síntomas más comunes:
- Enrojecimiento e hinchazón: Si tus encías están más rojas de lo normal o se sienten inflamadas al tocarlas, esto puede ser una señal de infección.
- Sangrado: ¿Te sangran las encías al cepillarte o usar hilo dental? Este es uno de los síntomas más comunes de gingivitis o de una infección en las encías.
- Dolor o sensibilidad: Aunque el dolor de encías no siempre es intenso, si notas incomodidad al masticar o al cepillarte, podría ser un indicio de infección.
- Mal aliento persistente: El mal olor en la boca que no desaparece con una buena higiene dental es otra señal de que algo no está bien, y puede deberse a una infección de encías.
¿Cuándo debes preocuparte por el dolor y sangrado de encías?
No todos los casos de dolor en encías o sangrado son graves, pero si estos síntomas se presentan con frecuencia, es importante que actúes a tiempo.
El sangrado ocasional durante el cepillado puede ser normal, pero si persiste, es una señal de enfermedad de las encías.
La periodontitis, por ejemplo, es una forma avanzada de infección que puede llevar a la pérdida de los dientes si no se trata.
Si el dolor de encías se vuelve constante o notas que las encías están retrocediendo (recesión gingival), es el momento de acudir a un especialista.
Estos síntomas indican que la infección en encías está avanzando y necesitas un tratamiento profesional para evitar complicaciones mayores.
Consejos para prevenir la gingivitis y periodontitis
Mantener una buena salud bucal es la base para prevenir una infección en encías y problemas más graves como la gingivitis o la periodontitis.
Aquí te dejo algunos consejos prácticos y efectivos que te ayudarán a mantener tus encías saludables y evitar complicaciones a largo plazo.
1. Cepillado correcto
El primer paso para prevenir una infección de encías es asegurarte de que te cepilles los dientes correctamente.
A veces, no es suficiente cepillarse rápido o una sola vez al día. Aquí te explico cómo hacerlo bien:
- Cepíllate al menos dos veces al día: Utiliza un cepillo de dientes suave o de dureza media, y asegúrate de cepillarte durante al menos dos minutos en cada sesión. No olvides cubrir todas las áreas de la boca, incluyendo las encías, donde la placa tiende a acumularse.
- Movimientos suaves y circulares: Al cepillar las encías, utiliza movimientos circulares suaves para no dañarlas. Un cepillado demasiado agresivo puede irritarlas y hacer que se retraigan.
- Cambia el cepillo regularmente: Lo ideal es cambiar tu cepillo de dientes cada 3 meses, o antes si ves que las cerdas están desgastadas. Un cepillo en mal estado no limpia de manera eficaz y puede acumular bacterias.
2. Uso del hilo dental
El cepillado solo no es suficiente para eliminar la placa y los restos de comida que quedan entre los dientes. El uso regular del hilo dental es fundamental para prevenir una enfermedad de las encías:
- Utilízalo al menos una vez al día: El hilo dental ayuda a eliminar los restos de alimentos que se quedan entre los dientes y que el cepillo no puede alcanzar.
- Sé cuidadoso: Pasa el hilo con suavidad por cada espacio entre los dientes, llegando hasta la línea de las encías sin presionar demasiado. Evita hacerlo bruscamente para no dañar las encías.
3. Enjuague bucal adecuado
Los enjuagues bucales antibacterianos son un complemento ideal para tu higiene diaria. Ayudan a eliminar las bacterias que causan la infección en encías y previenen la acumulación de placa.
- Elige un enjuague bucal sin alcohol: El alcohol puede resecar las encías y empeorar el problema. Opta por enjuagues que contengan ingredientes antibacterianos, como la clorhexidina o el fluoruro.
- Úsalo después del cepillado e hilo dental: El enjuague bucal es la última fase de tu rutina diaria. Úsalo al menos una vez al día para garantizar una limpieza más profunda.
4. Evitar el tabaco
El tabaco es uno de los principales factores que contribuyen a las enfermedades de las encías.
Fumar reduce la capacidad de las encías para repararse y aumenta el riesgo de infecciones. Si fumas, considera reducir o abandonar el hábito para mejorar la salud de tus encías y de tu boca en general.
5. Mantener una dieta equilibrada
Puede que no lo sepas, pero tu dieta también juega un papel imprescindible en la salud de tus encías.
Algunos alimentos pueden fomentar la acumulación de placa y bacterias, mientras que otros ayudan a fortalecer los dientes y las encías.
- Alimentos ricos en vitamina C: Las frutas y verduras como las naranjas, el kiwi y el brócoli son excelentes para mantener las encías fuertes y evitar la infección en encías.
- Evita los alimentos azucarados: El exceso de azúcar fomenta la proliferación de bacterias en la boca. Reduce el consumo de alimentos y bebidas azucaradas para prevenir la placa y las caries.
6. Visitas regulares al dentista
Aunque mantengas una buena rutina de higiene en casa, debes visitar al dentista de manera regular para prevenir problemas mayores.
- Hazte una limpieza profesional cada 6 meses o según te lo indique tu dentista. Una limpieza profunda eliminará la placa que se ha acumulado en las áreas más difíciles de alcanzar.
- Revisa tus encías: En cada visita, asegúrate de que el dentista examine la salud de tus encías para detectar cualquier signo temprano de infección en encías o enfermedad periodontal.
Siguiendo estos consejos, reducirás el riesgo de desarrollar una infección en encías y mantendrás tu boca sana por mucho más tiempo.
Recuerda que la prevención siempre será la mejor forma de evitar problemas en el futuro.
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